lunes, 22 de julio de 2013

A veces la Edad Contemporánea no es tan buena como las demas Edades.

A veces la Edad Contemporánea no es tan buena como las demás Edades.
¿Por qué?
Por el amor.  Sí, el amor. Esa palabra tan cursi como romántica a la que todos huimos pero nos acercamos curiosos. 
En otras épocas, era común, que él fuera mayor que ella. Que sólo existía el amor verdadero y entonces, te casabas.
¿Mi Edad favorita? La Moderna. Esa Edad en la que los niños con mi edad, ya se sabían todas las calles. Que conocían a todos y siempre quedaban en la calle y recorrían kilómetro y kilómetros. En que no se veía tan mal que él tuviera mas edad que ella. Que aún se conservaba el "Usted". Esa forma de hablar tan bonita, tan respetuosa... En la que no existían estas máquinas. Sí, me refiero a los ordenadores, móviles, nintendos... etc.
Quizá esto último no sea tan malo. Pero en esta época, no todo es tan bonito como lo pintan los libros que tanto adoro. En vez del tan bonito "usted" damos el puesto al "Ola ke ase".
¿Qué hay de quedar con los amigos con trece años? Nada. Tenemos tanto peligro a violadores, peleas, robos... A lo mejor no tantos peligros, pero a nuestro padres no parecen percatarse.
Y sobre todo... Salir con alguien. Sí, de esto sobre todo me quejo. Yo lo conocí en Andújar. Un día normal que mi prima decidió ir a la pista de tenis a jugar y a invitarlo. Le pregunté como se llamaba, ella me contestó: "Alejandro", mientras hablaba con él. Un vuelco al corazón. ¡Menuda casualidad! Se llamaba igual que mi personaje favorito. Y después volví a preguntar cuántos años tenía, a lo que ella me contestó: "18". Unas palpitaciones de mas en mi corazón. Nos llevamos la misma edad que Alex y Paula de CPP. Mi libro favorito. Me puse un poco roja al imaginarlo... Más tarde la oí decir por el móvil: ¿Ella? Ella es mi prima. (...) tiene 13 años. (...) Jajajaja. No te creas, no es tan cría como lo dice su edad. (...) Laura. (...) Adiós.
Recuerdo cuando le pregunté como era. Me dijo: Rubio... unos ojos bastante extraños, delgado...
"Y, ¿saliste con él?" Pregunté sin querer. Mi prima se rió y asintió. Vaya, pensé, quizá no sea tan guapo como lo pinta mi prima si ha salido con él.
Mi tío nos dejo en la rotonda. Y empezamos a caminar. Estaba muy nerviosa. Miraba a todos los dados. Y mirando vi a tres chicos sentados en un bordillo. "A lo mejor los conoce mi prima"
Se levantaron y caminaron hacia nosotras. Llame a mi prima y le dije que esos nos seguían. Ella me dijo que "esos" eran Alex y sus dos amigos.
Aun no he sentido sus labios en mis mejillas. No se presentó. Ni yo. Me dio una vergüenza increíble. 
Cuando llegamos al polideportivo, mi prima me dejó sola con ellos tres y se fue a entrenar. "¡Ay Dios mio!" Estaba sudando. Me senté en los banquillos y me puse a jugar al "Pou". Bien Laura, no hay nada mas interesante que jugar al Pou, pensé. Quise enviarle a mi hermanito un Whats App, pero me tardaba mucho para enviarse. Nadie mas estaba conectado, no se enviaban los tweets. ¡PUFF! Un suplicio. Bueno... quizá no tanto, ya que se iban y volvían todo el rato. En un momento en que se fueron, Alex esperó un poco y me dijo: "¡eh! Amiga, guardale esto a mi amigo sin que se entere." Aquello me sentó como una patada en el estómago. Lo miré, suspiré y dije cansada: tengo nombre, ¿sabes?. Sonrió y me contesto: ¡Es verdad! Pero siempre se me olvida... ¿Siempre? Pero... ¿desde cuando me conoce? Sonreí haciendo caso omiso a mis pensamientos y dije: Me llamo Laura. Pero prefiero Lauri. Se rió y me dejo el tabaco y las llaves de su amigo. "Muy bien Lauri, guardalo, ¿eh?" Y se fue.
Y así, todo el rato observándolos como se peleaban porque un amigo suyo lo provocaba... Como al que le había escondido el tabaco me hablaba, como los tres sudaban por el calor y... ¡Alex haciendo flexiones! Estaban compitiendo, y cuando se aburrieron, para quitarse el sudor, se limpió con la camiseta y pude ver que era como Jamie Campell Bower, no tenía tableta, pero tampoco era un anorexico. 
Nos fuimos por fin a la pista de a la pista de tenis. ¡Y que mal lo pasé al principio! No sabía jugar y me dieron en la cabeza. Pero me acabé cansando de jugar y de mi primo, que vino cuando nos fuimos a la pista de tenis. Me senté y vi que Alex decía que el agua estaba mala y me miré las manos. Genial, pensé, el mango de la raqueta destiñe y ahora tengo las manos manchadas. Sonreí y fui hacia donde estaban Alex y mi prima y le tendí la mano y le dije: ¿Me das la mano? Como ya nos hemos conocido... No se fió mucho, pero me dio la mano. Cuando me aparté empecé a reírme. Se miró la mano. Se la lavó con el agua de la botella que estaba mala y después de echarme agua en las manos para que me las lavara, me echó agua en la camiseta. ¡Será posible! ¡Me ha echado agua! Lo miré fingiendo estar enfadada y me dijo que no me pusiera así que me lo he ganado por mancharle la mano. Nos reímos y nos dimos los twitters y el Whats App. Por la noche hablamos, aunque mi prima no estaba tan contenta como yo... Por la noche le hablé y le pregunté sobre Alex, pero de la pregunta que me acordaré fue: ¿Y cómo besa? Ella me contestó: Eso lo averiguarás tu. A los dos días, volví a quedar con él. Aunque mi prima piensa que en realidad fue ella la quedó con él. ¡Me lo pasé genial con él! Pero se me olvidó pedirle que nos saca ramos una foto... Ainss como me arrepiento todavía. Esa noche... soñé con que lo besaba... ¡Era super romántico! 
Cuando volví, le hablé a mi madre sobre él y me dijo: Laura, sé que te gusta, que es como Alex Oyola, que os lleváis la misma edad que Alex y Paula y los dos son músicos pero... Cinco años de diferencia es mucho para salir con el, ¿no?
Pues ahí esta la cosa. Trece y dieciocho es muy feo. Y quince y veinte aun mas. Pero... diecisiete y veintidós no queda ya tan malo, ¿verdad? En otra época esa edad era perfecta para la típica frase de: Mi amistad hacia a ti se ha convertido en algo mas... Y después llegaba el beso furtivo. Sí, ese que te hace soñar y sientes que estas como la nata, empiezas sólida... pero al rato estás ya derritiéndote por él... Todavía pocas personas piensan en la primera vez sea especial. Y no, no me refiero a la primera vez que se hace el amor, sino a la primera vez que besas.
Y ¿los padres qué? Ellos desde pequeñitos ya salían con mujeres, pero ahora con sus hijas... ¡Hay que mantenerlas en un pedestal! Y después hay tres madres: las mejores: son las que te dejan salir con chicos, pero solo de una cierta edad de diferencia (suerte que la mía sea de este grupo) las firmes: hasta que no tengas veinte años no ve bien que salgas con chicos. Y las sumisas: hacen lo que el marido quiere, porque lo ven perfecto. 
Y yo digo... ¿el amor verdaderamente es ciego? Ya que se encuentra tras capas de huesos,músculos, grasa y piel. Es imposible que vea en que se enamora o no. Quizá se guia por los latidos del corazón... Si oyen algo que les gusta pues... nosotros lo entendemos como que nos enamoramos. O quizá... le da pereza fijarse en la gente y de vez en cuando se asoma y si cuando se asoma y ve algo que nos gusta... ¡PUM! Enhorabuena esta usted enamorada, ya le iremos informando como debe ilusionarse. 
Por eso yo prefiero decir... Mi amor no es mas mayor que yo, sólo que vino antes para hacerme el mundo mejor con su presencia.

Firmado:

Enana.

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